Monday, November 19, 2007

Venezuela: el secreto mejor guardado del Caribe

No es mi estilo publicar sobre política. Mucho menos sobre situaciones políticas de países ajenos al mío. Pero por mi reciente viaje a Venezuela me veo en la obligación moral de practicamente transcribir las opiniones y conversaciones que tuve con este maravilloso pero entristecido pueblo.
Que la cosa no es como la pintan afuera, eso es como obvio. Pero que la situación real es tan frustrante y sin una salida que se pueda por lo menos avisorar desde lejos, eso no todos lo conocemos. Venezuela es definitivamente un país muy hermoso, con tanta diversidad o incluso más que Ecuador. Un país enormemente rico, en el cual jamás se podría justificar que su pueblo deba hacer cola para conseguir un producto tan básico como la leche. Pero así es. Según todos y cada uno de los venezolanos con los que pude dialogar, nadie esta de acuerdo en forma sincera, con el presidente de la nación. De hecho sus opinones van mucho más allá del desacuerdo, y se acercan mucho más a la desolación, la resignación y el miedo al futuro. A tal punto de comentar que simplemente no tienen deseos de formar una familia pues ningún hijo merece vivir en ese tipo de entorno.
Que Chavez ha puesto al venezolano en contra del venezolano, que la clase media apenas puede subsistir, y que pretende quitarle sus bienes a quienes han trabajado para entregarselos a los "pobres", todo eso lo habíamos escuchado. Pero siempre hay una linea delgada aunque increíblemente significativa entre escuchar y ver. Venezuela se ha convertido en un pueblo realmente empobrecido más que económica, moralmente, pues todas estas "historias de terror" que nos llegan vía mail resultan ser patéticamente ciertas.
Los profesionales jovenes argumentan, con un cierta validez, que no todos los que han logrado obtener riquezas son pillos, no todos robaron para tenerlas, no todos se aprovecharon del mas débil para subir. ¿Que tiene de malo trabajar, esforzarse para alcanzar el bienestar tuyo y de tu familia?, ¿Porque el gobierno me va a quitar todo lo conseguido para darselo a una horda de malandros vagos? se preguntan sin respuesta. Lamentablemente el gobierno escuda sus acciones detras de un marco de socialismo de siglo 21 que no logra convencer. Con el argumento de que Venezuela es un país económicamente rico, gracias al petróleo, el dinero que ingresa se va para Cuba, Bolivia y porque no decirlo, también Ecuador. Y mientras tanto que hay de la educación y la salud del venezolano? Se justifica ayudar a otros países, si, pero solo cuando tu propio pueblo goza de bienestar.
El socialismo es una idelogía en principio muy buena y que a mi juicio no resulta utópica. Pero definitivamente no puede ser impuesta, mucho menos por un grupo de hombres que la pregonan pero no la respetan. Que se burlan del pueblo adquiriendo más y más bienes propios y lo aterrorizan destrozando sus bases más sagradas: el trabajo fuerte genera riquezas. El socialismo no se trata de que el pueblo entero sufra lo mismo, se trata de que todos gocen de los mismos beneficios. Pero si el mismo pueblo no logra ver el horizonte trazado por su lider, y considera que es un timador de primera, resulta por demás complicado llegar a feliz término.
Según los mismos venezolanos, la reforma planteada por Chavez arrasará sin lugar a dudas, pués el también controla totalmente el sistema electoral. No hay nada que hacer, sostienen llenos de frustración. Entre los puntos de la reforma se encuentra que si a el le da la gana de dictar estado de emergencia, se convierte en el dueño del país y de su gente. Podría mandar a matar sin dar razones, solo porque lo desea. Aunque el punto que más asusta a los venezolanos es el tener que entregar sus tierras, casas y hasta dormitorios a todo aquel que diga necesitarlo. Porque despues de todo "no es justo tener recursos vagos mientras hay tanta necesidad". Un ejemplo más de como un buen argumento puede ser mal utilizado cuando se intenta imponer.
A mi parecer solo los venezolanos pueden decidir el destino de Venezuela, solo ellos tienen el poder de escoger que camino tomar. No todo está perdido, pero si desean su libertad, probablemente solo la puedan conseguir a través de una verdadera revolución, en la cual tengan que decidir contra que opresor necesitan luchar: un opresor local o uno imperialista. Para mi la respuesta sería obvia .... patria, libertad o muerte!

3 comments:

Javier said...

Hola Mafalda...
Un saludo para vos desde Argentina.
Sinceramente no me cae nada bien tu presidente, de todas maneras no soy quien para juzgar a tantos km de distancia a un proceso que aqui no llega del todo claro.
Me parece que las alternativas patria o muerte, ellos o nosotros, imperio y dominados, son un tanto anacronicas.
Un gusto conocerte, aun no te he leido mucho, tengo problemas con mi servicio telefonico y estoy sin internet desde unos meses. Al borde del infarto virtual!!
Un beso desde aqui.

vrzelda said...

la situación de venezuela es terrible y lamento que tengan un presidente tan estupido. he visto en youtube sus argumentos totalmente ilogicos para hacer lo que hace. Es triste...
En cierto sentido si creo que el unico que puede cambiar eso es el mismo pueblo pero eso significaria muertes.
El pueblo ecuatoriano esta acostumbrado a derrocar presidentes a diestra y siniestra pero OJO, esto que los ecuatorianos ven con tanta naturalidad se ve como algo imposible para otros paises.
Yo espero que la situación de venezuela cambie pronto porque ya no hay quien calle a este tipejo.. tendremos que unirnos a la frase del rey de españa: Porque no te callas!! (le falto un gilipollas por ahi pero en fin...)

Snake Eyes said...

Es penoso y a la vez preocupante lo que se vive en Venezuela, penoso porque son un pueblo hermano con gente buena que no se merece ese futuro (aunque ellos eligieron a Chavez) y preocupante porque todo lo que ocurre en ese país, los ecuatorianos lo vemos como un reflejo a futuro de lo que puede pasar acá.

Y es que personajillos como Chavez y Correa se sirven de la avidez de cambio del pueblo, explotan las diferencias sociales para que germine el odio entre hermanos de un mismo país, nos venden la idea de un socialismo celestial que eliminará la pobreza cuando su verdadero fin es eliminar la riqueza que muchas personas han obtenido con esfuerzo.

Una solución a esto sin mediar revoluciones sangrientas, francamente no la veo, creo que es tiempo de hacer un "mea culpa" y aceptar las consecuencias de nuestros actos, en este caso, haber regalado el voto tan ligeramente, y la próxima vez que uno de estos mesias nos pida que nos dejemos salvar por ellos, no dudar de utilizar de manera oportuna el dedo medio de nuestra mano para hacerles saber nuestra posición.